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martes, 27 de junio de 2017

Hacela corta, Beckett, de Rubén Pires

Destilado del mejor Beckett en Buenos Aires


“No, no me arrepiento de nada, lo único que me fastidia es haber nacido, es tan largo, morir, siempre lo he dicho, tan cansador a la larga”. Samuel Beckett, Apuntes 1957

Va y Viene”, Celeste García Satur, Jessica Schultz y Marina Tamar


Por más que intentemos asirla, la voz de Beckett siempre se escabulle. Ese teatro que es palabra, silencio, corporalidad. Absurdo lógico. Humor trágico. 

Rubén Pires, en la escena porteña, se ha enamorado de esa voz y conjura al genio en espectáculos deliciosos, que son una oportunidad invalorable para el lector de Beckett de ver cómo suena esa voz encarnada. Y, sobretodo, dentro de la cartelera del teatro independiente, esta es una puerta al universo beckettiano para el espectador neófito que podrá asomarse al ABC de una de las poéticas más orginales y personales del siglo XX. 

Seis piezas breves, seis pequeñas joyas literarias que giran alrededor de los grandes temas del irlandés: la muerte, la memoria, la soledad humana, el vacío de la existencia, el pasado, la locura. Un río de voces que flotan en la oscuridad, ecos de ecos en un vacío oscuro. 

Como un fino mecanismo de relojería cada actor aporta su impecable actuación con una solidez y experiencia admirables. Destaco especialmente el trabajo estremecedor de Jessica Schultz en "La mecedora" y en la escalofriante "Las pisadas", que me llevó al recuerdo imborrable de Bette Davis en What Ever Happened to Baby Jane?

La iluminación, el maquillaje y el diseño de pelucas también aportan el toque necesario para reconocer al instante el inconfundible mundo de Samuel Beckett.

Una cita con el mejor teatro, en El Tinglado, Mario Bravo 948, CABA, todos los martes a las 20.45 en punto. A no perdérsela.
El escritor y dramaturgo, Samuel Beckett.CORDON PRESS



Funciones: Martes, a las 20.45 hs. en El Tinglado, Mario Bravo 948.-

Entrada $300.- (Est. y Jub $190.-) 


“Este trabajo con el material de Samuel Beckett comenzó hace cuatro años atrás, cuando me sentí absolutamente capturado por su universo y empecé a llevar al teatro la belleza profunda, irónica y poética de su obra, junto con la historia tan particular de él, en tanto personaje. Luego de montar “Esperando a Godot” continuamos con “Beckett vs Beckett”, junto con “Beckett y el mundo de las abejas” (a partir de la novela del francés Martin Page, sobre la vida del artista). En esta nueva propuesta, nos propusimos junto con Hugo Halbrich, trabajar en las versiones con seis de sus obras breves; y se sumó como, supervisor de dramaturgia, Lucas Margarit (Investigador de Beckett y titular de la cátedra de Literatura Inglesa de la UBA). La selección de las obras cortas, no tan representadas, tiene como objetivo que el espectador habite, en un lapso de 65 minutos, diversas aristas del universo Beckettiano. Para la puesta en escena, elegimos una teatralidad manifiesta poniendo a la vista los hilos de la misma, con el fin de transitar una construcción conjunta entre los actores y el público. Pusimos principal énfasis en la musicalidad de la palabra para llegar al “tempo” de cada personaje. La indagación sobre la composición poética del texto nos llevó a una partitura actoral de un realismo atroz. Nos interesa más que lo que se dice, qué pasa cuando se dice eso que se dice. Ante el cambio de paradigmas que nos acarrea la posmodernidad, el universo de Beckett se despliega estéril, seco, polvoriento, burlón y brutalmente irónico sobre nuestra forma de transitar la existencia. En estas obras se ve la erosión del lenguaje, la búsqueda de la desecación y de la sustracción del mismo. El desafío entonces consistió en cómo encarar esa estructura teatral, donde los personajes no tienen pasado, ni memoria, ni existe la peripecia aristotélica. El teatro en estado puro. Provocar un ámbito en el cual la conversación sea el irónico campo de batalla donde transcurre la existencia. Hablo, luego existo. Estamos ante un autor que desconfía de lo que las palabras tienen por decir como denotadoras de la realidad y nos invita a otras vías para develar lo que está detrás de ellas. Nos propusimos responder a la invitación con un procedimiento semejante: poner en escena al material desde lo enigmático y profundo de un lenguaje entrecruzado con él mismo y con el mundo, y que solo da indicios de sus secretos”, declara Rubén Pires



Ficha Técnica: 

Autor: Samuel Beckett, con traducción y adaptación de Rubén Pires y Hugo Halbrich (supervisión Lucas Margarit) 
Obras e Interpretes: “La mecedora”, con Jessica Schultz; “Monólogo”, con Gerardo Baamonde; “Va y Viene”, con Celeste García Satur, Jessica Schultz y Marina Tamar; “Ohio Impromptu”, con Eduardo Lamoglia y Gerardo Baamonde; “Pisadas”, con Jessica Schultz y Celeste G. Satur y “Play”, con Carlo Argento, Marina Tamar y Celeste García Satur.
Vestuario: Juan Micheli
Escenografía: Pablo Graziano
Diseño de Pelucas: Miriam Manelli
Diseño de Maquillaje: Analía Arcas
Dirección: Rubén Pires

Prensa: Silvina Pizarro // Tels.: 66983515 // 1550448132 // info@silvinapizarro.com


lunes, 26 de junio de 2017

Poética de los Husos, Tránsitos posibles en lo textil

7 mujeres del arte textil en el Paco Urondo




"Los husos destinados a ayudar en el hilado de las fibras textiles, pueden ser útiles también para representar nuestros posibles trayectos en el arte textil. Por él avanzamos cada una con su huso, dejando correr un haz de fibras que dibuja el sendero elegido, que lo muestra lineal y tenso, o enredado y repleto de nudos, flexible, dudoso en ocasiones y siempre dispuesto al cruce, a la red y a las tramas colectivas.

Como desde el comienzo de los tiempos y en todas las culturas, las manos de las mujeres toman el huso, retuercen la fibra, componen hilos, generan formas y le otorgan tintes, palabras, conceptos. En aquellas que lo adoptan como materia plástica, existe una indagación, un mirar que no escatima la propia vida en el pasaje hacia el conocimiento y la búsqueda de una expresión sensible. 

Recorriendo el laberinto, los husos que nos guían son variados, como variados los usos del arte textil, con su amplitud de recursos y procedimientos, tan permeable frente a otras disciplinas como afín a las producciones en cruce. En esa heterogeneidad del hacer, que enriquece y amplía los límites de su campo artístico, lo textil nos encuentra en camino.

En el huso de cada una de nosotras, van ovillados vivencias y recuerdos, mandatos y saberes heredados, rebeldías de mujeres que nos inspiran, lecturas, escuchas y experiencias estéticas signadas por el esfuerzo o la osadía. Todo eso cabe en nuestros husos y más, cuando los compartimos."
                                                    Viviana Debicki, artista y curadora  de la muestra



Los que anden por el microcentro no dejen de pasar hasta el 7 de julio por el Centro Cultural Paco Urondo, 25 de mayo 201, CABA. Allí encontrarán un destilado de lo mejor del arte textil: Viviana Debicki, Emilia Demichelis, Marisa Domínguez, Carmen Imbach Rigos, Betina Sor, Natalia Suárez y Florencia Walfisch.
Ellas se expresan con hilos, con telas, con fibras, con fotos rescatadas de la memoria colectiva. Expresan el inconsciente femenino con su temática, sus texturas, su mirada de resistencia en tiempos del fin del patriarcado.
En su minucioso y deslumbrante trabajo ponen al servicio de la expresión artística toda la experiencia de generaciones de miles de mujeres postergadas en el anonimato de la exquisita creatividad, usualmente desplegada en las labores de bordado y costura. Ellas interpelan, ironizan, festejan, honran a la mujer con sus bordados increíbles, que ya no son meros adornos sino técnicas expresivas que despiertan la curiosidad del espectador anonadado.

A continuación algunos detalles tomados en la muestra, fotos gentileza de Daniel Gluzmann:

Viviana Debicki

Viviana Debicki

Viviana Debicki

Betina Sor

Natalia Suárez


Carmen Imbach Rigos

Marisa Domínguez

 Florencia Walfisch

Emilia Demichelis




Para más información:


domingo, 25 de junio de 2017

La Pilarcita, de María Marull

Los milagros existen

Algunos creen que un milagro llega de forma inesperada. Otros lo construyen día a día, casi de manera artesanal.



"Yo canto pa´que las cosas no se me pasen de largo", este es uno de los versos rescatados de las coplitas inspiradas e inspiradoras de Hernán(Juan Grandinetti) que va hilando con su guitarra y sus versos los distintos momentos de la obra. Y eso es un poco lo que yo hago con mis razones del gusto. Por eso empezaré de atrás para adelante, es decir desde lo último a lo primero que vi en este más de un mes en que sentarme a la computadora fue solo para trabajar y en los momentos libres atesoré experiencias hermosas como esta.

La Pilarcita es un éxito teatral en su tercera temporada en el "Camarín de las Musas". Me la recomendaron varias personas, y ninguna me contó nada. Solamente el asertivo: "Vos tenés que ir a ver La Pilarcita". Y fui. Y disfruté del milagro del teatro independiente: talento, frescura, amor, originalidad. La perfección de lo simple, la sugestión de la palabra y la actuación que nos hacen sentir inmersos en un pueblo de Corrientes con 40 grados a la sombra.


Por La Pilarcita pasa la vida misma, con las ilusiones y desilusiones; con las resignaciones y las negaciones con las que nos cortamos las alas; con los encuentros inesperados que pueden cambiar el rumbo del destino que creemos marcado para siempre. Porque por ese patio correntino pasa la vida misma: el amor, la fe, la obsesión, los sueños, el miedo, la amistad.


Decir que me gustó es poco, La Pilarcita, me fascinó. Por su dramaturgia impecable, por su humor tierno, por su enigma, por sus leyendas, por sus diálogos, por su poesía. Pero sobre todo por sus actuaciones: aplaudo de pie a Selva (Luz Palazón), Celina (Pilar Boyle), Hernán (Juan Grandinetti) y Celeste ( Mercedes Moltedo). Ellos hacen posible que veamos no solo lo que pasa en ese patio sino el enigma de la habitación y la fiesta pagana de la santita del litoral.

Y no digo nada, nada más. Vayan, sorpréndanse, salgan con una sonrisa de oreja a oreja y sigan recomendándola. Porque esta es una historia que habla de segundas oportunidades en la vida, una historia de esas que nos hacen bien.



Viernes y sábados 20 y 22 hs.

LA PILARCITA
De María Marull

Dirección María Marull

Con Pilar Boyle, Juan Grandinetti, Mercedes Moltedo y Luz Palazon

Algunos creen que un milagro llega de forma inesperada. Otros lo construyen día a día, casi de manera artesanal.

Tercera temporada. Funciones: viernes y sábados 20 y 22 hs. Duración: 65 minutos

El Camarín de las Musas

Mario Bravo 960, CABA. Reservas: 4862-0655

http://www.elcamarindelasmusas.com/

Entradas: $ 250 y $ 200 (estudiantes y jubilados con acreditación).




PREMIOS Y DISTINCIONES

-Tres nominaciones a los premios ACE.
-Tres nominaciones a los premios Trinidad Guevara.
-Seis nominaciones a los Premios Teatro del Mundo – Dramaturgia (María Marull), Dirección (María Marull), Creación e interpretación musical (Julián Kartun), Escenografía (Alicia Leloutre y José Escobar), Vestuario (Jam Monti), Iluminación (Matías Sendón).
-Seleccionada para el festival Teatro x la Identidad 2015.
-Distinguida como una de las mejores producciones teatrales de 2015 en los balances anuales de los diarios La Nación (Pablo Gorlero), Tiempo Argentino (Jorge Dubatti), y Buenos Aires Herald (Luciana Ekdesman y Julio Nakamurakare).

 -Premio Escuela de Espectadores de Buenos Aires – María Marull, 10 Artistas Destacados de 2015.
- Premio Revista Planeando sobre BUE – María Marull, Autora de comedia 2015.
 -Premios Luisa Vehil – Luz Palazon, Nominada como Mejor actriz de reparto.

Bonus track para los que ya la vieron:
La Pilarcita es una santita popular de Concepción Corrientes que murió a los 4 años cuando viajaba con su familia en la carreta desde Mercedes. Se le cayó su muñequita y ella se tiró para salvarla, encontrando la muerte en octubre de 1917. Desde hace cien años, los fieles le rezan y le piden milagros, y en la capillita que construyeron le dejan muñecas de todo tipo.
Yo no conocía esta historia, parte de la cultura argentina, como la veneración al Gauchito Gil o a la Difunta Correa. Esta obra rescata como punto de partida de su historia esta festividad religiosa para que se crucen de manera creíble y orgánica los personajes de Selva y Celeste, que sin saberlo, potencian un cambio en sus vidas.

Les dejo este videito que encontré para que tengan más información sobre el tema: